Luis Quiñones García.
Seurat es uno de los pintores
neoimpresionistas más destacados y conocidos. Nació en Francia en 1859 en el
seno de una familia de posición económica acomodada, por lo que a lo largo de
su carrera no se vio en la necesidad de ganar dinero de manera apremiante.
Además los medios de los que disponía le permitieron entrar en la escuela de
bellas artes, donde obtuvo una formación clásica y entró en contacto con las
obras de Ingres y Delacroix (Momplet Miguez, 1980).
Cuando abandonó la academia en 1880
comenzó sus estudios sobre la luz y el color, basándose en los recientes descubrimientos
de Rood, Sutter, Blanc o Henry, aunque su mayor influencia fue la ley de
contraste simultaneo de los colores elaborada por Chevreul. Las prácticas
relacionadas con los nuevos conceptos teóricos las desarrollaba en dibujos,
alguno de ellos aceptado en el salón. Se incorpora a la sociedad de artistas
independientes y allí conoce a Signac, a través de este conoce a Camile
Pissarro y gracias a su mediación consigue incorporarse a la ultima exposición
del grupo impresionista en 1886 (Momplet Miguez, 1980), allí presento El Domingo por la tarde en la isla de la
Grande Jatte, obra que no tuvo buena acogida ni siquiera entre el grupo
impresionista. A raíz de este evento entrará en contacto con Durand-Ruel, quien
le dará la oportunidad de exponer algunos de sus lienzos en Nueva York, donde
al igual que en Bélgica con el Grupo de los Veinte cosechara más éxito. Las
últimas exposiciones de su vida las realizará en el Salón de los Independientes
a partir de 1891.
El Domingo por la tarde en la isla de la Grande Jatte. Seurat. |
Chahut. Seurat. |
Es considerado el gran maestro de la
escuela divisionista ya que incorpora plenamente el pensamiento matemático y
las leyes de la física a la pintura, en un claro método científico que pretende
convertir en universal (Momplet Miguez, 1980). Sus obras se
basarán en escenas de ocio parisiense y en parajes de las afueras de la ciudad
junto al Sena, como refleja su lienzo Un
baño en Asnieres. En otra de sus piezas más relevantes, La Grande Jatte, opta por la
representación de burgueses, empleados y trabajadores en una masa de personajes
ordenados que siguen una composición rigurosamente calculada (Solana, 1991). Otro tema
recurrente en su repertorio es el mundo del espectáculo, centrado en las
diversiones populares como el circo, el café o los conciertos, muy alejado de
la opera y los ambientes selectos representados por Degas. En este sentido
destaca Chahut, una obra en la que
desarrolla todo un código de señales con el que pretende representar las
emociones de los personajes en la pintura, a través de líneas rectas
verticales, horizontales y oblicuas (Solana, 1991). Su temprana
muerte a los 32 años de edad le impidió seguir desarrollando su obra y la
aplicación del método científico.
Si bien Seurat fue, en cierto, modo
el precursor del nuevo estilo no fue se gran teorizador. El gran teórico del
neoimpresionismo tenemos que buscarlo en su compañero Signac, que desarrolló
obras como De Delacroix al Neoimpresionismo,
en 1899. Este era un pintor también francés, nacido en 1863 en el marco de una
familia burguesa, que pese a haberse formado en un taller académico siempre
tuvo gran predilección por el grupo impresionista. De este modo entre sus
máximas influencias debemos situar a Monet y Sisley, por encima incluso de su
maestro Bin (Momplet Miguez, 1980). Expuso en la
última exposición de los impresionistas junto a Seurat y participó tanto en los
salones independientes como en los del grupo de los veinte en Bélgica. En la
línea de su labor teórica se relaciono con los medios literarios simbolistas y
escribió artículos para periódicos y revistas como Le Cri du Peuple o Art et
Critique.
Su estilo avanzó hacia una mayor
libertad en cuanto al tamaño de la pincelada y la factura de las obras. Sus
lienzos centrados en el mar y la navegación fueron tomando la forma de mosaicos
y estarán muy influidos por los viajes el artista a Venecia o Constantinopla.
En 1908 es nombrado presidente de la sociedad de artistas independientes, cargo
que compaginara hasta su muerte con la práctica de la acuarela y la producción
literaria (Momplet Miguez, 1980).
Bibliografía:
Momplet Miguez, A.E., 1980. El Impresionismo. Publicaciones del Ministerio de Cultura, Madrid.
Solana,
G., 1991. El Impresionismo. Anaya,
Madrid.
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